La caza se consolida como el tercer deporte con más licencias federativas en España

Lejos de ser una actividad minoritaria, la caza se consolida como una de las prácticas deportivas con mayor implantación en España. Así lo demuestra el nuevo Estudio del impacto económico, social y ambiental de la actividad cinegética en España, elaborado por la prestigiosa consultora Deloitte para la Fundación Artemisan, que sitúa a la caza como el tercer deporte nacional por número de licencias federativas, solo superado por el fútbol y el baloncesto.
Con un total de 330.423 deportistas federados, la caza supera a otras disciplinas de gran popularidad como el tenis, el pádel, el golf o los deportes de montaña y escalada. Esta cifra evidencia la enorme penetración social de la actividad cinegética en España, especialmente en zonas rurales, donde representa no solo una práctica deportiva, sino también una forma de vida, tradición y vínculo con el entorno natural.

Una estructura asociativa sólida y activa
El estudio destaca el papel clave de las 17 federaciones autonómicas de caza y de la Real Federación Española de Caza, que en conjunto representan el mayor colectivo dentro del sector cinegético nacional. Este entramado federativo es la columna vertebral de un movimiento asociativo profundamente arraigado, que impulsa y vertebra la actividad en todo el país.
A 31 de diciembre de 2023, se contabilizaban además 891.889 licencias de caza autonómicas vigentes y 17.624 licencias interautonómicas, lo que reafirma la magnitud real del colectivo cazador en España más allá del ámbito estrictamente federativo.
Otro dato significativo es la existencia de 6.308 sociedades o clubes de cazadores federados, que, en muchos casos, actúan como los principales agentes sociales en sus municipios, organizando actividades, formando a nuevos cazadores y colaborando con autoridades y entidades locales para la conservación del entorno.

Andalucía encabeza el ranking de cazadores federados
Por comunidades autónomas, Andalucía se sitúa a la cabeza del movimiento asociativo cinegético, con 87.737 licencias federativas, seguida por la Comunidad Valenciana (35.388 federados) y Extremadura (33.516). Estos datos consolidan el liderazgo de la Federación Andaluza de Caza y su papel estratégico en el impulso de la caza social y federada en todo el país.
Divulgación: pieza clave en la defensa del sector
Además del componente deportivo, el estudio pone en valor el compromiso divulgativo de las federaciones de caza. Según los datos recogidos, más del 70 % de las federaciones realizan acciones de divulgación, con una media de 10,8 jornadas al año, que congregan a más de 1,5 millones de personas anualmente y suponen una inversión media de 18.369 euros por federación cada año.
Estas acciones son fundamentales para informar, formar y visibilizar la realidad de la caza entre la sociedad, y se traducen en actividades como charlas, talleres educativos, jornadas de puertas abiertas, ferias rurales y eventos de concienciación ambiental.
Los datos presentados por la Fundación Artemisan reflejan una realidad incuestionable: la caza es una de las actividades deportivas más practicadas en España, con una base social sólida y una estructura asociativa en crecimiento. Su impacto va mucho más allá del deporte, y se proyecta sobre la economía rural, la conservación de la biodiversidad y la identidad cultural de miles de municipios.
La caza no es solo un deporte. Es parte del alma del campo.
